martes, 22 de octubre de 2013

ZOOLOGIA - Los anfibios, vertebrados de piel desnuda

LA PIEL Y SUS GLANDULAS. La piel de la mayoría de los anfibios no tiene escamas y es lisa. Está formada por una capa epidérmica fina. Hay numerosas glándulas pluricelulares, que segregan la mucosidad que cubre la piel de estos animales. En ciertas regiones, localízanse intumescencias que constituyen glándulas venenosas, cuyo producto, blanco y lechoso, sale por numerosos poros. En la mayoría de los sapos (género Bufo) forman estas glándulas dos eminencias alargadas a ambos lados, al nivel de los hombros. En una especie (Bufo paracnemius) se encuentran estas glándulas situadas en las piernas. En las puntas de los dedos de muchas especies de ranas arborícolas hay también glándulas que facilitan la función adhesiva de aquéllos. LA LENGUA PROTRACTIL DE LOS ANUROS. La lengua de los anuros es sumamente curiosa; hállase implantada detrás del labio inferior, quedando su parte libre dirigida hacia atrás. En estos animales, tiene la lengua una función importante: la captura de los insectos de que se alimentan. Para ello, la lengua del anuro, cubierta de una sustancia viscosa, es proyectada rápidamente hacia delante, sobre la presa, e inmediatamente recogida, volviéndose hacia atrás. LA VOZ DE LOS ANUROS. Los anuros son los primeros vertebrados que producen sonidos. Poseen una laringe formada por cartílagos y con un par de bandas elásticas internas que funcionan como cuerdas vocales, y además existen bolsas vocales internas que se inflan de aire y dilatan la piel de la garganta, funcionando como una caja resonante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario