LOS ALACRANES Son también arácnidos, y tienen, como las arañas, cuatro pares de patas. Sus palpos maxilares son, no obstante, muy desarrollados, y terminan en pinzas semejantes a las que se observan en los cangrejos. El cuerpo del alacrán, de forma alargada, está compuesto por una parte anterior más gruesa, que contiene la cabeza, el tórax y el preabdomen, y una parte posterior más estrecha, comúnmente llamada cola y conocida también como postabdomen, la cual termina en un aguijón. Los alacranes son muy venenosos, y su picadura ha causado muchas muertes en niños pequeños, provocando en los adultos serios trastornos locales o generales. El veneno es segregado por una glándula localizada en el último segmento de la cola, y es inoculado por el aguijón terminal, por cuyo interior pasa el conducto de salida del veneno. Son animales carnívoros. Cazan sus víctimas agarrándolas con sus pinzas anteriores e inoculándoles el veneno en seguida mediante una picadura del aguijón. Viven debajo de las piedras, de las cortezas de los árboles o los montones de leña, y dentro de las grietas del suelo. Con frecuencia habitan también en los ranchos construí-dos con barro, escondiéndose en las rendijas de las paredes; andan por dentro de esas viviendas y se suben sobre los objetos o en las camas, siendo entonces peligrosos, pues reaccionan en cuanto se los molesta.
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